“SEGUIMOS SIENDO UNA EMPRESA FAMILIAR, Y NO QUEREMOS QUE
DEJE DE SER ESO”
Perfumería García cumple 25 años desde su fundación, con un
estupendo salón de ventas, y con mucho trabajo. Su principal, Rubén García,
señala que ante todo, Perfumería García es “una familia, no yo solo”. Recordó
que “comenzó hace 25 años como un deseo de salir adelante, de continuar una
línea de la que provengo, que es de comerciantes, mi padre y mi madre, que
fueron los que me formaron y que también mi hermano esta haciendo en la tienda
(Juancito)”. Evocó aquel inicio en 1988, “con muchos deseos de mejorar, junto
con quien era mi esposa, Patricia, hoy mi socia, empezamos esta pequeña
empresa, Álvaro nuestro hijo ya era nacido”. “Fue complicado empezar a trabajar
en un rubro que en Minas tenía mucha competencia, pero hoy miramos la
proyección de estos 25 años, hemos tenido momentos muy lindos, otros menos
lindos, pero seguimos siendo la empresa familiar que comenzó hace 25 años, y no
queremos que deje de ser eso. Porque hay una comunión muy buena entre nosotros
y el personal que nos acompaña”.
DE LOS UNOS Y DE LOS OTROS
La vida comercial ha debido sortear espacios complicados
respecto a la economía del país. García reconoce que “es una lucha, pero se
aprende mucho, además trabajamos en un rubro que cuando hay crisis siempre es
el que se recorta, porque no es de primerísima necesidad, aunque siempre hay
productos que lo son”. Recuerda que con su hermano “vivimos de forma muy intensa
la crisis del 1982 cuando se rompió la tablita, teníamos una disquería, “La
cachila”, y pasamos a no tener nada, entonces uno aprende que en este país no
se puede endeudar en moneda extranjera, como el dólar, es complicado”. Con esa primera
lección, cuenta que en la crisis del 2001, Perfumería García “no estaba
endeudada en dólares, y hasta hoy seguimos así. Eso nos ha permitido estar
saneados, y las crisis se pasan mejor. Cada ser humano de las malas
experiencias, siempre aprende en la vida, y sirven para protegerse en el
devenir”.
EN UNA PLAZA CHICA
Señaló como uno de los momentos más difíciles para
Perfumería García “pero creo que también para muchos comercios de Minas” la
apertura de las grandes superficies. “Nunca pensamos que nos fuera a pegar tan duro,
dos grandes comercios se abrieron en un mes (Tata y Nico). Esta es una plaza
muy chica, la población siempre está decreciendo, cuando hay poca gente el
consumo sigue siendo el mismo, o menor pero entran ‘jugadores’ de mucho poder,
como fueron estas grandes superficies, inhiben la plaza comercial. Yo me siento
culpable de no haber previsto las consecuencias y la pegada de la instalación
de Nico (hoy El Dorado) y Tata en el mismo mes. Nosotros pasamos de tener 6
empleadas a tener 1 que todavía está trabajando con nosotros, y la caja
disminuyó a un 25% de lo que hacíamos, o sea si en el mes recaudábamos $
10.000, pasamos a recaudar $ 2.500, fue terrible”.
LA GENTE FIEL
Todo es un gran aprendizaje, dice García y agrega que “Perfumería
García siempre trata de colaborar con la gente, si no existiera esa gente que
nos ha sido fiel en momentos difíciles, hubiéramos tenido que cerrar”. Cuenta
anécdotas de esa disposición de la gente, cuando no tenía determinada marca
famosa, probada, llevaban otra, no se iban sin comprar. “Esa fidelidad es una
de las cosas que yo más valoro en estos 25 años, y por eso le tengo que
devolver a la sociedad lo que nos da, no existiríamos como empresa si la gente
no nos hubiese apoyado, que son anónimos”.
Finalmente dijo que el comerciante minuano “siempre tiene
que pelearla porque es una plaza chica, pocos habitantes, mucha competencia y
hay que estar todo el día. Es una empresa familiar, hago lo mismo que hacía
hace 25 años, el día que esa esencia se pierda me tengo que ir, aquí hay
sentimientos, nos conocemos, compartimos todo, entre todos”.
Por muchos años más.
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