sábado, 20 de abril de 2013

Diálogo nacional sobre políticas de drogas


"CONTROL Y REGULACIÓN ESTATAL DEL MERCADO DE MARIHUANA"
Se realizó en el Centro Protección de Chóferes con un importante número de público el Diálogo Nacional sobre Políticas de Drogas "Control y Regulación estatal del mercado de marihuana", que contó con la presencia de importantes personalidades locales y nacionales.
El lanzamiento de estos debates se hizo el 4 de abril en Montevideo, Tacuarembó, Maldonado y Colonia.
Previo al debate, Primera Página conversó con el director departamental de Salud de Lavalleja, el doctor Pablo Leiva, la coordinadora de la Junta Departamental de Drogas de Lavalleja, María Noel Galeano, el secretario General de la Junta Nacional de Drogas, Julio Calzada, y el subsecretario del Ministerio de Educación y Cultura, Óscar Gómez.

GENERAR ESPACIOS
Galeano explicó que en julio del año pasado el presidente de la República lanzó la idea con las medidas de seguridad de la legalización o control del mercado de marihuana. “La idea de estos debates es generar espacios de intercambio con la ciudadanía, para la construcción de esta nueva ley que probablemente se apruebe”. Afirmó que en el debate se aprecia “mucha gente a favor, hay movimientos más que nada en Montevideo, que defienden la legalización y el control, por diversas razones, por lo general consideran que sería viable y positivo una regulación de un mercado que hoy existe y es ilegal, y para eso hay que controlarlo”.

“LO QUE SE HA HECHO NO HA SERVIDO PARA NADA”

Leiva se refirió a la importancia de que se genere el debate. “Todos podemos tener nuestra opinión que puede ser diferente, es bueno, pero en el fondo comunicar que la idea no es legalizar ni aprobar una droga, es regular y controlar para establecer un mejor criterio para aquellos que la consumen”. Leiva expresó que “todas las drogas son nocivas, generan una cantidad de problemas, pero acá se trata de la vinculación de la droga con el narcotráfico, que es el gran flagelo que tiene Sudamérica y el mundo, la idea es tratar de tomar una parte de eso para regular y mejorar, y no meter una cantidad de gente que se podrían acercar a drogas más fuertes, a través de esa regulación. Se está en la búsqueda de soluciones a un problema, no queremos que el narcotráfico genere más violencia, es un paso para desvincular el narcotráfico y la violencia del consumo de drogas, que son malas, no hacen bien, pero tenemos que probar esto porque lo que se ha hecho no ha servido para nada”.

“QUEREMOS RESULTADOS DIFERENTES”
Calzada señaló la importancia de debatir este tema, “por la relevancia que tiene para la sociedad, para la salud pública, para la convivencia ciudadana”. Destacó que en los debates realizados “la respuesta de la población ha sido muy buena”. Recordó Calzada que este debate “está instalado en el mundo desde hace varios años, Holanda cambió su política de drogas hace más de 30 años, en los últimos 5 años se han incorporado actores muy relevantes, como Kofi Annan, exsecretario general de la ONU y Premio Nobel de la Paz, los  expresidentes Fernando Enrique Cardoso de Brasil, César Gaviria de Colombia, actores importantes de la vida internacional han planteado la necesidad de modificar la política de drogas por el impacto que está teniendo en la sociedad. Tenemos el caso de México, con 60 mil muertos en los últimos 6 años, cerca de 100 mil afectados, porque se habla de 30 mil desaparecidos, es realmente muy preocupante”.

“DEBEMOS SER CAPACES”
Óscar Gómez recordó que Uruguay tiene una larga política de regulación de vicios (*). “Fue polémico cuando se propuso si era posible que el estado interviniese en los juegos de azar, eso hoy ya no está dado. Cuando reguló y controló la prostitución, más de una de nuestras bisabuelas puso el grito en el cielo. Uruguay avanzó mucho con educación, regulación y controles estatales, el más reciente es el control del tabaquismo, el resultado está a la vista: en esta misma reunión en la que estamos en los prólogos hace 8 años estaría contaminada de humo, hoy eso no sucede, hubo resistencia, hasta encadenamientos en un centro comercial, eso hoy no está más en debate, Uruguay corajudamente ha trabajado sobre estos temas. Por algo tenemos que una multinacional como Phillips Morris, entre el derecho al libre mercado y el derecho a la salud, ellos opinan que el libre mercado, Uruguay opina por la salud de su población. No tenemos por qué asombrarnos porque debate hoy el Uruguay los pros y los contras de la regulación del mercado del cannabis y la separación del mercado de las drogas. En Uruguay se controlan y regulan los medicamentos sicoactivos, tan es así que hay que comprarlos con receta y en lugares especializados y con personal especializado. Por ese camino de regular, educar, controlar, reducir daños es que estamos abordando esta discusión”.
Destacó que la Junta Nacional de Drogas ha tenido la posibilidad de invitar a estudiosos de diferentes países “para saber dónde estamos parados, qué cosas nos igualan y en cuáles tenemos matices, Uruguay es un país a escala para este tipo de cosas, somos poco más de 3 millones de habitantes, no tenemos selvas, ni montañas, fuimos capaces de tener un control de 10 millones de vacunos para ser caravaneados y hacerles la trazabilidad. ¿No podremos abordar seriamente el control y el apoyo a los usuarios problemáticos de drogas? Estos debates tienen la virtud de promover distintas visiones, buscar consensos, y cuando no existen están las mayorías y minorías, a todos hay que atender. Es un tema que interesa a todos, porque todos de alguna manera nos ha golpeado”, concluyó Gómez.

 (*) Nota de Redacción: Normalmente se define un vicio como todo aquel hábito o práctica que se considera inmoral, depravado o degradante en una sociedad. Para la cultura occidental son vicios, por ejemplo, la arrogancia, la corrupción política, la negligencia, la vanidad. Modernamente, y desde el punto de vista médico y psicológico, sin embargo, se suele considerar al abuso y el consumo abusivo de drogas (tanto las legales como el alcohol y el tabaco, como la marihuana, la cocaína, la heroína y otras) como adicciones (incluso el juego puede ser una adicción, la ludopatía), y a quienes sufren esas adicciones como adictos y/o enfermos, desde el momento que se genera una dependencia física y/o psicológica de la sustancia o práctica. Esto tiene consecuencias en las posibles soluciones: una persona podría abandonar voluntariamente un “vicio”, desde el momento en que no hay adicción, pero muchos necesitan apoyo y tratamiento para dejar de ser adictos, y en el caso de muchas drogas, es prácticamente imposible abandonarlas sin apoyo externo.

0 comentarios :

Publicar un comentario