Hace un par de días, los seis
astronautas de la Estación Espacial Internacional (International
Space Station, ISS) recibieron un envío a domicilio.
La cápsula Cygnus, de la empresa
Orbital ATK, llevó a la ISS más de tres toneladas de comida fresca
y equipamiento, y la entrega se realizó en el espacio, a unos 400 km
de altura sobre el Océano Índico.
El cohete “repartidor” despegó de
Cabo Cañaveral el martes de la Semana de Turismo por la noche, y se
aproximó a la ISS el fin de semana pasado.
El astronauta de la NASA Timothy Kopra
utilizó el gran brazo robótico de la ISS para capturar la cápsula.
Cuatro horas más tarde, la cápsula quedó firmemente acoplada a la
estación espacial.
Se trató del primero de tres envíos
de suministros que serán enviados a la ISS en poco tiempo. Una
cápsula rusa con suministros despegará mañana, y luego llegará
otra de la empresa espacial SpaceX. Desde hace ya un tiempo, la NASA
utiliza a empresas privadas de Estados Unidos para enviar cargas al
espacio.
Llegaron, además de los comestibles,
diversos equipamientos. Pinzas robóticas, una impresora 3D de la
empresa Made in Space (“Hecho en el Espacio”), que se utilizará
para que cualquiera pueda hacer una impresión en tres dimensiones en
el espacio, a un precio que seguramente será bastante alto. Al
parecer, la nave llevó también huevos de Pascua a la ISS.
Cuando toda la carga sea transportada a
la ISS, la cápsula será liberada, y regresará a la Tierra, aunque
nunca llegará a ella: se quemará al reentrar en la atmósfera
terrestre.
La ISS
La ISS es un enorme esfuerzo
internacional para desarrollar la investigación espacial. Es un
laboratorio de microgravedad en el que viven y trabajan seis
personas, mientras viajan a unos ocho quilómetros por segundo, dando
una vuelta completa a la Tierra en 90 minutos.
La ISS ha estado ocupada de manera
permanente desde noviembre del año 2000, y han estado allí 222
personas de 18 países.
La tripulación dedica unas 35 horas
semanales a investigar en muchas disciplinas relacionadas con el
espacio, la física, la biología y la química.
Al mismo tiempo, facilita y fomenta un
fuerte mercado comercial privado para cargas espaciales.
La ISS es el objeto más brillante del
cielo nocturno, luego de Luna, y se puede ver a simple vista.
Registrándose en el sitio de internet
https://spotthestation.nasa.gov, es posible recibir mensajes en el
teléfono celular, indicando la hora exacta a la que hay que levantar
la vista hacia el cielo... ¡y saludar a la estación!
El módulo principal de la ISS tiene 51
metros de largo, y la estructura completa (con antenas y paneles
solares), 109 metros de largo, poco más que una cancha de fútbol.
El sistema de paneles solares tiene un largo de 73 metros, y el peso
total de la estación es de casi 420 toneladas. Genera unos 84
kilowatts con sus 8 sistemas de paneles solares, y 52 potentes
computadoras controlan todos los sistemas de la estación.
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