Cuentan algunas personas que concurren desde hace tiempo a los talleres que dicta Lía Panero, sobre historia universal y sobre viajes, que muchas veces, al surgir una duda en una charla o discusión, muchos van a sus celulares a buscar información, en Google. Lía no utiliza Google. Lía no utiliza ningún teléfono celular. Simplemente se da vuelta, o se levanta de su sillón, y va a alguna de las bibliotecas de su casa. Sin dudar, toma un libro, lo abre, y encuentra la información que necesitaban. Antes de que nadie la haya encontrado en Google.
Primera Página visitó uno de los talleres que dicta Lía Panero,
para conocer de primera mano esas reuniones, a la que concurren personas que
tienen 20 años de edad, hasta otras que tienen casi 100. Todas, con un
entusiasmo que a veces es difícil encontrar en ninguna actividad curricular, en
casi ninguna institución. El hecho que las personas no concurren por obligación,
sino por el placer de saber y conocer, sobre temas que ellos mismos proponen,
sea quizá una parte pequeña de la explicación.
Así, en este año 2022, en los talleres se han discutido
temas como la Guerra Civil Española, la Guerra de los Balcanes y la muy actual
Guerra de Ucrania. Y muchas veces con testigos y actores directos de esas
historias. Lo que mueve a todos, incluyendo a Lía, es una inmkensa curiosidad
por conocer y aprender.
Además, en los talleres que lidera Lía se habla de Cesarion,
el hijo de Cleopatra y Julio César, de un viaje a Grecia que Lía y otra de las
participantes hicieron, y de la milenaria historia de Grecia. Sobre la peste
negra que afectó a Europa y a buena parte del mundo en el siglo XVI, o sobre
cualquier otro tema que sea propuesto por los participantes, o que surja en las
reuniones que hacen regularmente.
EL SINAÍ
Una de las talleristas de Lía estuvo en el Sinaí (Egipto), en el Congo y en Haití, formando parte de los Cascos Azules uruguayos en esas zonas conflictivas del mundo. En algunas de las reuniones, compartió recuerdos y experiencias. Nada que tuviera que ver con batallas u operaciones militares, sino con la cultura y la historia de esos lugares. En el Sinaí vio como todas las mujeres locales, cuando iban a cualquier lugar público, estaban con un hombre que las acompañaba, incluso dentro de la peluquería. ¿Por qué? Porque la cultura y la religión locales no permiten que las mujeres estén sólas en lugares públicos. Hace tan sólo unos días, los participantes de todos los talleres de Lía se reunieron en el comedor de su casa, la sala más grande del lugar, para conversar sobre la experiencia de esta participante en el Sinaí, Egipto e Israel-Palestina. Casi nada de región sobre la qué conversar. Allí se originan las tres religiones monoteístas más importantes de la historia -el judaísmo, el cristianismo y el islam-, y la interacción y muchas veces el conflicto entre ellas está presente todos los días.
KRISHNAMURTI
Una conversación, o una propuesta para hablar sobre las iglesias pentecostales, llevó a hablar de religiones en general. Lía recordó entonces que Krishnamurti (1), uno de los más grandes pensadores de la historia humana, estuvo en realidad en Montevideo, en 1935, y dictó varias conferencias en el Paraninfo de la Universidad de la República. Entonces, Lía recuerda, y trae un libro. Se trata de un libro de su padre, que su madre le regaló a ella cuando su padre había fallecido, con las transcripciones de las tres conferencias de Krishnamurti en el Paraninfo, incluyendo las preguntas de los espectadores uruguayos. Seguramente, ese libro es un verdadero tesoro, para cualquiera.
Hablando sobre las misiones de los Cascos Azules uruguayos,
Alfredo Palma, uno de los participantes, recuerda que un pariente o conocido
participó de la primera misión de militares uruguayos en el extranjero, en
Camboya. Y cuenta que allí, al igual que ahora en otras regiones del mundo, los
militares uruguayos solían ser los que más fácilmente se relacionaban con la
población autóctona, por su sencillez y apertura. A través del fútbol trababan
-y traban- inmediatamente vínculos amistosos con casi todo el mundo. Palma
cuenta que en Camboya, los más parecidos a los uruguayos eran los militares
rusos -entonces soviéticos- que estaban también allí, porque al igual que los
uruguayos, hablaban mucho de sus familias, sus hijos, y eran emotivos y
amigables. Además, cuenta Alfredo, los soldados uruguayos solían tener un mayor
nivel cultural que sus colegas de otros países, entre otras cosas porque todos
habían al menos terminado en ese entonces la escuela primaria o el Ciclo Básico
liceal, algo que no era así en otros ejércitos.
LAO TSÉ
Luego de que participamos en uno de sus talleres, Lía nos regaló un marcador de libros, igual al que regala a cada uno de los participantes de sus talleres.
Es un marcador casero, hecho por ella misma, y en él
encontramos una frase elegida por ella y escrita de puño y letra: “Si
preguntas, serás ignorante por cinco minutos; si no preguntas, serás ignorante
toda la vida” (Lao Tsé, maestro de Confucio, siglo VI antes de Cristo).
(1) Jiddu Krishnamurti fue un célebre pensador y orador en
materia filosófica y espiritual, de padres indios. Sus principales temas incluían
la revolución psicológica, el propósito de la meditación, las relaciones
humanas, la naturaleza de la mente y la división sicológica entre el observador
y lo observado, entre otros temas.
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