jueves, 3 de septiembre de 2015

Celíacos minuanos reclaman en la Junta un mayor apoyo del Estado

La Comisión de Recepción de la Junta, integrada por Analía Basaistegui, Ernesto Cesar y Gustavo Risso, recibió a Alejandra Carrera y a la doctora Tania Zipitría, integrantes del Grupo de Celíacos Minuanos, que entre sus objetivos tiene informar, concientizar y educar a la población de lo que significa ser celíaco. “Se le llama enfermedad, pero a nosotros nos gusta más el término condición celíaca, porque tenemos una forma distinta de vivir, y porque nuestra alimentación es el único tratamiento”, dijo Zipitría.
Reconocieron que hoy se habla más de esta enfermedad o condición, pero aún sigue siendo bastante desconocida, “una de las características es que somos intolerantes al gluten”, dijo Carrera.

CONTROL DE PRECIOS SOBRE LOS PRODUCTOS

Recordó Zipitría que por estos días, en el marco de una medida nacional “que empezó un grupo de Tacuarembó, donde en todas las ciudades se hizo una pancarta para hacer un poco de ruido, de lograr más visibilidad, para que el gobierno nos tenga en cuenta, ya que se realiza el presupuesto nacional. Lo que solicitamos es tener más controles sobre los precios de los productos que consumimos los celíacos, que deben ser libres de gluten, estos tienen un costo mayor, hay un cuadro comparativo, donde hay productos que salen hasta tres veces más. La materia prima cuesta mucho, y si se lo compra elaborado cuesta aún muchísimo más. Un niño de Maldonado, que estuvo en la movilización en ese departamento, decía, para que los pobres puedan hacer la dieta. Una persona que tiene recursos va a poder hacer con mayor facilidad la dieta, y cumplir el tratamiento, que una persona de bajos recursos, que aunque se le da una canasta por parte del INDA, es insuficiente”.

DIFERENCIAS GRANDES

Manifestó Carrera que respecto a los precios las diferencias “son enormes”, “no sé si la Junta puede decretar la regulación de los precios de los productos para celíacos, porque tenemos diferencias grandes de los precios de Montevideo a la capital del departamento, y de ésta a los precios en las localidades del interior. Acá en Minas, de un comercio a otro hay diferencias de 20 y 30 pesos en los productos”.

QUE HAYA PRODUCTOS

Carrera señaló que otros grupos departamentales presentan en la Junta respectiva la solicitud para que exijan a los comercios la presencia de productos para celíacos, “que tal vez fuera a través de una reglamentación, porque no hay ninguna normativa sobre los productos de alimentación de celíacos, como tampoco el que se separe en góndolas los alimentos de celíacos de los que no lo son, también para diabéticos”. Agregó que en Minas solo en el supermercado El Dorado (de Morales Arrillaga y Carabajal) tiene productos de este tipo. En los cursos de manipulación de alimentos de la IDL no hay ningún módulo que incluya a los alimentos de celíacos; también se refirió a la falta de un menú para celíacos en los restaurantes, “solo el Parque de Vacaciones de UTE ANTEL tiene”.

DIAGNOSTICADOS

Sobre la cantidad de personas que tienen condición de celíacos, Zipitría dijo que “se sabe a nivel nacional que está diagnosticado el 1%, unas 34 mil personas”, y agregó Carrera que una cifra similar habría sin diagnosticar. Acotó Basaistegui que “uno de cada 100 es celíaco, y de 10 celíacos 7 estarían diagnosticados”.

CONTAMINACIÓN CRUZADA

También se refirieron a la contaminación cruzada de alimentos. Carrera explicó que “en una carnicería tienen un bols con pulpa normal y al lado milanesas ya empanadas, si el carnicero agarra las milanesas y cae pan rallado en la pulpa, ya eso no lo puede consumir el celíaco”. Zipitría señaló que ya “estamos muy entrenados al respecto los celíacos, vamos mirando los movimientos de quien nos despacha. En mi casa la mitad somos celíacos y la otra mitad no. Compro milanesas comunes y carne para hacer mis milanesas, y primero pido mi carne, para que la persona al tocarla no tenga nada de las milanesas empanadas, si hago a la inversa -lo he visto- tocan la milanesa y después la carne, ya ahí queda contaminada. Son pequeños trucos que uno va aprendiendo con el diario vivir. También en la fiambrería con la máquina de cortar, y en Tata y El Dorado nos dijeron que si pedimos que la limpien, lo tienen que hacer, es algo que se logró hace ya dos años cuando fuimos a hablar de estos temas”.

CANTINAS

Carrera propuso que las licitaciones de las cantinas, tanto en instituciones públicas como privadas, por exigencia de la IDL, tuvieran “o un menú o productos para celíacos y otras enfermedades”. Basaistegui señaló que la Ley 16.096 dice que “en todos los lugares donde hay mucha gente deben tener los alimentos aptos y aparte, pero no se aplica la ley”.

SÍNTOMAS

Cesar preguntó cuáles son los síntomas de ser celíaco. Zipitría dijo que son “muy variados, hay síntomas clásicos intestinales -diarrea, estreñimiento, dolor crónico, distensión abdominal, flatulencias- también pueden ser cefaleas, migraña, osteoporosis, el hipotiroidismo está muy asociado, diabetes, anemia, en los niños detención de crecimiento, son muchas cosas, y a veces por desconocimiento de la enfermedad puede perder mucho tiempo en diagnosticarse, porque la persona vive sin saber, la lección final es acumulativa, se pueden tener varios síntomas pero no los diagnostican y a la larga se encuentra que es celíaco”.

NO HAY CONTROLES

Carrera agregó que “en el Uruguay no hay controles como puede ser que al sacar el carné de salud te lo puedan diagnosticar. Esa es otra lucha que tenemos. Hay un análisis que es más caro que el de los anticuerpos, que se hace en otros países, que ya diagnostica si vas a tener la enfermedad o no, y para el estado es más barato porque se hace una vez. Además es una enfermedad inmunológica. Estaría bueno que se implementara un análisis”. Por lo que dijeron que “se debería hacer un diagnóstico precoz, porque para el sistema de salud no tiene costos, una vez diagnosticado depende solo de la dieta”, dijo Zipitría.

CANASTA

Sobre la canasta para celíacos que entrega el INDA a través de la IDL, dijo Carrera que “en principio era para pacientes de Salud Pública, si tenías mutualista no te la daban, tiene que ver con los ingresos, hoy se le ha retirado a mucha gente. Se considera que la celeaquía es de por vida, y si su buena calidad de vida depende de la dieta, no tendría que limitarse a si la persona tiene mutualista o atención de Salud Pública, la tendrían que recibir todos”. También señaló que los componentes de la canasta “están mal distribuidos”. “Años atrás hablé con el encargado de INDA, pero no hubo solución. Te dan un kilo de harina de arroz, un kilo de fideos, 4 kilos de azúcar por mes, la propuesta que hice fue que nos dieran menos azúcar y aceite, que se consiguen al precio normal, y aumentar los artículos básicos del celíaco, que son mucho más caros, como es la harina de arroz, la leche en polvo -¡que es carísima!-, la maizola, fideos de arroz”.

LIGA DE DEFENSA DEL CONSUMIDOR

Cesar señaló que para los controles de existencia en góndolas y el equilibrio de los precios, “quien controla es la Liga de Defensa del Consumidor, que tiene que estar funcionando en la DGI, y es donde pueden acudir, hacer esos planteos, como consumidores celíacos, es una sugerencia para que la tengan en cuenta”.

PONIENDO VOLUNTAD


El grupo no tiene un respaldo jurídico, “no somos una asociación, ni tenemos una estructura, somos un grupo de amigos con la misma problemática, que nos unimos, informamos, buscamos soluciones a los problemas que van surgiendo, en Montevideo está ACELU, ellos nos conocen, yo soy la referente para Minas”, concluyó Zipitría.  

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